Lavado de manos: Tres errores que los niños pueden estar cometiendo

Lavarse las manos bien es una de las claves para poder reducir el riesgo de contagio de coronavirus, y aunque seguramente hará meses que ya le explicaste a tus hijos cómo se deben lavar las manos, es importante fijarse en que lo hagan bien y no cometan errores que son del todo comunes, tanto en niños como en adultos.

Lavado de manos: Tres errores que los niños pueden estar cometiendo

Tenemos que admitirlo, el lavado de manos constante puede llegar a ser algo realmente pesado o aburrido, pero es efectivo frente al coronavirus, de modo que aunque los niños se quejen tienen que seguir haciéndolo a diario y además, sin cometer ningún error.

Desde el pasado mes de marzo, hemos acostumbrado a los niños a que se laven las manos todos los días, pero es posible que de vez en cuando se rebelen, se quejen o sencillamente, se les pasen las indicaciones par un lavado correcto.

Por ello es importante que repasemos la importancia del lavado de manos con agua y jabón, y que le recordemos a los pequeños de la casa que aunque no se den cuenta, con las manos lo tocan todo y a todas horas. Si no se limpian adecuadamente, corre el riesgo de contaminar todo con suciedad y bacterias. Así que es importante que traten de comprender algunos errores de higiene que podría cometer.

No se lavan las manos lo suficiente

La media de lavados a los que hemos podido llegar durante la pandemia,  y todavía seguimos, está entre los 10-12 al día y también los niños pueden haber llegado a lavarse las manos tantas veces, pero la importancia no es la cantidad sino hacerlo realmente cuando es necesario o cuando es más elevado el riesgo de contagio.

En ese sentido es importante recordarle a los niños que tenemos que lavarnos las manos antes, durante y después de preparar la comida, y también antes de comer. Por lo tanto, si nos lavamos las manos al comienzo de la preparación de los platos y eso es todo, es mejor recordar que también hay que lavarse las manos antes de sentarse a la mesa. Y luego no las tenemos que lavar también cuando volvamos al exterior o a hacer cualquier otra cosa en casa  y cada vez que vayamos al baño (posiblemente antes y después).

No se lavan las manos por el tiempo correcto

Un enjuague rápido es demasiado apresurado. Recuérdale a los niños que deben hacer el lavado de menos al menos 20 segundos después de que hayan extendido el jabón de manera uniforme. Un truco es cantar una canción para calcular el tempo correcto y quizás la que más habrán cantado estos días es «Cumpleaños feliz», pero lo cierto es que pueden cantar cualquier canción que les guste, o podemos ponerles también la canción de «Baby Shark» adaptada al lavado de manos.

No hacen demasiada espuma

Hacer espuma mientras se lavan las manos es algo que gusta a todos los niños, pero deben entender que han de hacerla para limpiar bien las manos y eliminar cualquier virus o bacteria y no para jugar. Lo primero que tienen que hacer es mojar bien las manos con agua y luego aplicar el jabón, frotando bien incluso entre los dedos y la muñeca, especialmente si recientemente hemos utilizado guantes desechables.